Todas las piscinas públicas, incluidas las de barrios y complejos de apartamentos, están reguladas e inspeccionadas por Salud Pública. Especialistas en Salud Ambiental realizan más de 4,000 inspecciones al año para garantizar que los operadores de piscinas las mantengan seguras y saludables. Las inspecciones se realizan tanto para detectar riesgos químicos como físicos.

Los especialistas en salud ambiental inspeccionan las piscinas de temporada y las piscinas de uso permanente con regularidad durante todo el año. El personal también evalúa los planes de nueva construcción o renovación para garantizar que se solucionen las deficiencias estructurales y mecánicas.

A continuación se enumeran las solicitudes y formularios para cada condado.